miércoles, 27 de febrero de 2008

Fresones vestidos de chocolate y coco con nata montada

Esta mañana he ido al mercado y no he podido resistirme a comprar fresones. Estamos en temporada y no hay puesto de frutas que no las venda.

Es una fruta que me gusta mucho por su versatilidad , ya que con ella se puede realizar desde una riquísima mermelada , un estupendo batido o como en éste caso un postre al que me es difícil decirle que no, pues combina tres ingredientes que me gustan : fresones, chocolate y nata. Espero que lo disfrutéis .



Ingredientes :

Fresones
Chocolate para repostería en tableta marca Nestlé
Coco rallado
Mantequilla
Nata montada

Preparación:




1.- Fundir el chocolate con un poco de mantequilla al baño maría. Ensartar los fresones en unos pinchos de madera. Mojar el fresón en el chocolate fundido recubriéndolo casi en su totalidad




2.- Colocar los fresones en un vaso evitando que se toquen para que el chocolate se solidifique un poco. Antes de que el chocolate esté sólido mojar la punta de cada fresón en coco rallado . 
Colocarlos sin que se toquen en un recipiente y meter en la nevera, para que el chocolate se endurezca bien.




3.- En el momento que vayamos a servir las fresas, sacarlas de la nevera , extraer los fresones con cuidado de los pinchos de madera y colocarlos de manera artística en un plato en círculo y en el centro añadir nata montada.

Nota : 

He utilizado nata que viene ya preparada ( es decir agitar , presionar y nata montada instantánea …… ) Pero por supuesto se puede usar nata montada casera.

Sin protocolos , coger con los deditos el fresón , moja en la nata montada y a la boca . El contraste de sabores y texturas es una delicia . Éstos fresones están de escándalo .



2 comentarios:

Recetas al instante dijo...

pues yo encuentro estupendo y bonito tu blog y que rico este postre.
Tengo unos fresones en la nevera asi que creo me animare a hacerla.
Saludos
olga.

maetiare dijo...

ya verás como te gustan... eso si no es muy light que digamos , pero de vez en cuando soy indulgente conmigo misma y me permito éstos pequeños placeres.